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Una tendencia básica es, en general, la mezcla global o global-mix, con un toque de romanticismo. En contraste con la frialdad y virtualidad de Internet, las personas quieren un hogar acogedor, con formas y colores armoniosos y accesorios cómodos.
Los objetos se seleccionan conscientemente y se ponen en escena con “autenticidad".
Esta puesta en escena significa que los objetos no están colocados indiscriminadamente en cualquier lugar, sino que se colocan muy conscientemente en el espacio para ofrecer una imagen global coherente.
Así, el global mix admite ideas decorativas y muebles de todas las culturas del mundo; y surgen hábitats nunca vistos.
Las tendencias específicas quizá se puedan resumir de la siguiente manera: están en auge todas las ofertas para interconectar el hogar.
El negro es el nuevo blanco; en los colores dominan los tonos vivos, sobre todo los fuertes de un solo color; las camas de muelles ensacados seguirán siendo populares en la próxima temporada; y el cuarto de baño se convierte en templo de bienestar.
Una novedad es, sin duda, que el dormitorio se amplía para poder ser utilizado como sala de estar adicional.
La decoración está siendo redescubierta como un elemento de diseño. Accesorios de moda, abundancia de almohadas, diseño de madera y artículos hechos en casa son tanto una parte de la casa como los zapatos son parte de nuestra indumentaria. Elementos como los textiles y las lámparas que cuelgan en racimos son sustanciales para completar el diseño interior.
Por un lado, la casa nunca había estado tan ordenada, libre de basura y limpia, en un sentido minimalista, como lo son hoy: La existencia sencilla, sin adornos ha sido elevado a la única cosa con cualquier valor estético. Por otro lado, sin embargo, la resistencia a este aspecto limpio también está ganando terreno.
La gente considera que parte de lo que hace una casa un hogar está equipando con accesorios personales y elementos decorativos.
Asimismo, se aprecia la tendencia hacia los conjuntos completos: cuando se piensa en el sofá también se contempla la idea de los cojines, la mesita lateral, la alfombra, las estanterías... Los accesorios ya no son el plus sino la esencia.
Las paredes han perdido totalmente su rigidez, hoy son plásticas a través de los elementos decorativos donde el toque se da a través del papel pintado, galería de fotos, letreros, foto murales, o cualquier otro elemento que rompa su bidimensionalidad.
