El negro es el color que muestra la juventud de una manera más evidente porque es el que evidencia la edad de una persona con mayor claridad.
Así que las próximas fiestas decembrinas serán muy joviales, pues una tendencia bien marcada es la del uso del negro en la decoración navideña.
Dramático, con un montón de efectos y un toque de glamour, este 2015 está dispuesto a ser decididamente festivo, incluso no convencional. Aunque la inclinación es, como siempre, hacia los materiales naturales, el deseo de lo inusual y peculiar es claramente evidente. Y qué más inusual que el “una negra Navidad”.
El negro no sólo está encontrando cada vez más su camino en la decoración festiva, sino también en los adornos para el hogar. Su efecto es espectacular, llamativo, místico.
Y si recuerdas las tendencias de las que hablamos al inicio de año, observarás que será también una Navidad masculina, elegante y sofisticada como un frac; cumpliendo con lo que la moda prometía.
Un árbol artificial en color negro, con sólo unos adornos brillantes, se convierte en una imponente declaración.
Estrellas de papel negras expresan elegancia y una visión moderna o incluso algo rebelde. Y aunque parece severo la decoración con accesorios negros como velas y jarrones, combinados con colores metálicos –plata y cobre, sobre todo- darán ese toque de elegancia y majestuosidad que se busca en las fiestas.
No menos impresionante es el efecto de blanco, que es también una tendencia para 2015: un árbol artificial blanco, decorado con blanco y oro -o incluso de colores brillantes- crea un efecto glamoroso.